En los últimos tiempos estamos asistiendo a un cada vez mayor número de intervenciones sobre jardines que se saldan con la desaparición de los mismos. Son muchos los que en aras de la comodidad, ahorro de agua o por desconocimiento deciden que todo su jardín o parte de él no merecen cobertura vegetal ninguna y un solado o césped artificial son más que suficientes.
José Elías Bonells, adjunto a la Jefatura de Parques y Jardines del Ayuntamiento de Sevilla tiene un blog que es una fuente inagotable de experiencia, y en él se hace eco de esta problemática que en lugares como Inglaterra ya están poniendo coto. Al fin y al cabo, el tan manido cambio climático que vivimos extiende sus causas y consecuencias desde los jardines de las casas hasta los bosques del trópico.
Repasando brevemente las ventajas de los jardines en el medio urbano tenemos:
- Ayudan a controlar las temperaturas urbanas, protegiéndonos del calor y el frío extremos.
- Absorben CO2. * ver fuente
- Maximizan la eficiencia en el funcionamiento de los sistemas de climatización. * ver fuente
- Absorben y mitigan los ruidos urbanos.* ver fuente
- Ayudan a prevenir inundaciones y flujos de agua erosivos.
- Proporcionan hábitats importantes para la vida silvestre.
- Mejoran la salud humana tanto psicológica como físicamente.
La verdad es que este post podría alargarse hasta alcanzar las dimensiones de un ensayo o tesis doctoral, pero nosotros solo queremos avivar en el lector el interés por ese pedazo de tierra que tiene enfrente de su puerta, y que con una adecuada intervención, en vez de agravar el cambio climático, lo mitiga. Para terminar, un ejemplo:
Gonzalo tiene un adosado con un jardín frontal de 50m2. Le da trabajo y no lo tiene bonito, por lo que da un aspecto desaliñado a la entrada de su casa. Quiere solucionar esto de una vez por todas y pide presupuesto a una empresa para solar el maltrecho césped y arrancar ese seto viejo. En su lugar un nuevo muro bien rematado que le proteja de miradas indiscretas y una solera moderna con alguna maceta para ver algo de verde. Un mes después (pongamos mayo) ya lo tiene todo listo y queda satisfecho al verlo.
Ahora empieza el relato de las consecuencias:
Mayo viene lluvioso, y Gonzalo y Lucía se felicitan porque ya no tienen riesgo de que barro, polvillo o abono manchen sus zapatos. Parece que las florecillas de las macetas están bien y su vida sigue con normalidad. Pero un día de lluvia, semanas después, se dan cuenta que el agua del tejado corre sin control desde el canalón hacia los muros nuevos, no han previsto dirigir su caudal… antes se filtraba en la tierra. Ahora además de luchar contra ese chorro han dejado de recargar de humedad el suelo, y todo la lluvia, hojas y barrillo se va a la alcantarilla. ¡Si todo el mundo hace eso vamos a atascar el colector!
Pero mayo termina y los miedos se van. El incipiente verano se deja ver en ese bonito y despejado patio: luz, buena tempertura… todo son ventajas –hasta que el mercurio marca los 25º–. –Lucía, ¿no hace mucho calor hoy?. Pues no sé cariño, en el jardín de atrás estamos bien. –¡Pues delante parece agosto!. –A ver…, pues sí, echa el toldo, que no entre el calor por la ventana de la cocina.
No vamos a seguir con la historia, pero ya sabemos cómo evoluciona junio, julio, agosto y septiembre, y cómo termina finalmente: instalando un aire acondicionado que ayude a bajar la temperatura de la casa. Una máquina que expulsará su calor al propio patio y que terminará por cerrar el círculo vicioso que han logrado con un jardín que no absorbe agua, no genera sombras, no favorece la evapotranspiración, no acumula rocío, no invita a usarse durante el año por sus extremos térmicos, desperdicia las precipitaciones; y en definitiva, es lesivo para el cambio climático.
Si buscas reducir el consumo de agua, mejorar la estética o mejorar los accesos de tu jardín hay alternativas que lograrán obtener las ventajas que se describen arriba en mayor o menor grado, pero siempre jugando a favor del clima y naturaleza circundante. Buscando optimizar los recursos y generando un ambiente beneficioso para la salud.